Migración, escasez de competencias e IA: replantear nuestra forma de trabajar

Nuestro mundo laboral está experimentando un cambio fundamental. ¿Cómo encontrar el camino hacia una manera eficiente y humana de crear valor? ¿Y cómo pueden las nuevas tecnologías ayudarnos a lograrlo?

Daniel Marino supervisa maquinaria en una planta de energía de carbón en Canadá, ganando 62.000 dólares canadienses al año. Buen salario propio de un buen trabajo, pero Daniel Marino sigue buscando un nuevo desafío. En su perfil digital están las 29 habilidades que ofrece para un cambio de trabajo. La mejor opción del experto en carbón es buscar un trabajo como técnico solar: Marino tiene el 72% de las habilidades requeridas y podría esperar un aumento salarial a 70.000 dólares.

Aplicar las habilidades donde se necesitan

Detrás del perfil digital de Marino y del análisis preciso de sus oportunidades está la empresa estadounidense SkyHive. La empresa emergente, en la que Deutsche Bank tiene participación, utiliza un sistema basado en IA para analizar datos relevantes para el mercado laboral de más de 200 países y en 86 idiomas, desde perfiles de trabajo hasta informes anuales y solicitudes de patentes. Esto ofrece una visión sólida de los mercados laborales globales.

"Estamos utilizando SkyHive para llevar las habilidades de demanda exactamente donde se necesitan", dice Rachel Sumner, directora gerente de la empresa de servicios de recursos humanos Talent, que está apoyando la transformación masiva de la industria energética de Canadá en nombre del gobierno canadiense.

La escasez de expertos ralentiza la innovación y el crecimiento en todo el mundo

Las cifras son alarmantes: ya sea en América del Norte, Singapur o Portugal, ya sea en la industria energética, las TI, las telecomunicaciones o la industria de la construcción: los trabajadores cualificados escasean en muchos países e industrias de todo el mundo.

Según un estudio del Foro Económico Mundial (FEM), en 2025 habrá escasez de trabajadores calificados en más de la mitad de todas las industrias del mundo. El año pasado, el 77% de todos los empleadores del mundo se quejaron de las dificultades para encontrar el talento que necesitaban, según un estudio del proveedor de servicios de personal Manpower. Al mismo tiempo, la falta de trabajadores cualificados se está convirtiendo en un obstáculo para el desarrollo empresarial de muchas empresas. Los trabajadores necesitan una formación adicional específica para adaptar sus capacidades a las nuevas tareas y, según el FEM, seis de cada diez trabajadores necesitarán formación adicional para 2027.

Las cifras muestran que nunca antes las empresas, o incluso economías enteras, se han enfrentado a mayores desafíos a la hora de establecer el rumbo correcto y crear así las condiciones para un mayor crecimiento económico y una mayor prosperidad. Pocas veces las soluciones han sido tan complicadas de encontrar y más complejas, a todos los niveles. Está claro que la brecha cada vez mayor de trabajadores cualificados amenaza con frenar la innovación y frenar el crecimiento económico.

"El problema tiene muchas facetas", afirma Marc Schattenberg, de Deutsche Bank Research. "Los sectores de la economía que requieren mucha mano de obra, se ven especialmente afectados. Y muchos países están inmersos en una competencia global por estos trabajadores".

Entonces, ¿qué podemos hacer para romper el círculo vicioso?

¿Qué puede hacer la política, qué pueden hacer las empresas, qué puede contribuir cada individuo a superar este dilema? ¿Puede la migración o las nuevas tecnologías cerrar la brecha a largo plazo? ¿Y cómo encontrar el camino hacia una manera eficiente y al mismo tiempo humana de crear valor? En otras palabras, ¿un escenario en el que el hardware y el software quitan trabajo a las personas y les dan más libertad para la creación de valor creativo?

¿La migración como salvavidas?

Con la Ley de Inmigración de Trabajadores Calificados aprobada en el Bundestag en junio de 2023, el gobierno alemán quiere crear incentivos para inmigrantes calificados, perspectivas para solicitantes de asilo rechazados y el fortalecimiento de la educación y la capacitación. Cualquier persona que pueda mostrar un título reconocido en Alemania debe poder buscar un empleo cualificado en el futuro. En consecuencia, un mecánico también debe poder trabajar como, por ejemplo, un empleado del sector logístico. Los empleadores tendrán más autonomía para decidir si las competencias lingüísticas son suficientes para el trabajo, y los inmigrantes "con potencial" podrán solicitar la llamada "tarjeta de oportunidad", siguiendo el ejemplo de Canadá y Australia. De acuerdo con el proyecto de ley, el Gobierno Federal espera 60.000 nuevos trabajadores cualificados solo de esta medida.

¿Jobturbo AI?

La inteligencia artificial también podría ser al menos parte de la respuesta a estas preguntas. La consultora McKinsey predice que la IA generativa podría aportar hasta 4,4 billones de dólares estadounidenses anuales a la creación de valor global. La economía alemana también podría beneficiarse de este impulso tecnológico: para 2040, el producto interno bruto alemán podría aumentar en hasta 585.000 millones de euros gracias a la IA, un aumento del 13%.

Cómo la IA está revolucionando la industria de los medios

Algo que actualmente está en sus inicios pero que podría volverse cada vez más común en el futuro está sucediendo en BurdaForward, un grupo editorial con sede en Múnich, donde la inteligencia artificial está jugando un papel cada vez más importante.

“No necesitamos que los seres humanos escriban resúmenes y noticias rápidas, pero sí que la gente revise esa información, para rastrear las fuentes”, explica Oliver Markert, responsable de innovación creativa de BurdaForward, en una entrevista con WhatNext – Deutsche Bank. “Parte del trabajo manual se puede hacer con tecnología: con la ayuda de la IA, reunimos la información: mensaje corto, mensaje largo, audio, video, con imágenes. Solo tenemos que hacer este modelo estadístico de IA una vez. El contenido se puede volcar en este modelo, por así decirlo, y producir como en una línea de montaje. La inteligencia y la diligencia humanas serán entonces responsables del control de calidad final y de suma importancia”.

Por lo tanto, ha llegado el momento de repensar el trabajo.