Hipotecas

En la hipoteca a tipo de interés variable, el tipo de interés se revisa de forma periódica y está sujeto a la variación del índice al que esté referenciado. Generalmente las revisiones son anuales, aunque se pueden encontrar revisiones a un menor plazo, siendo el índice más utilizado, el Euribor, que es publicado mensualmente por el Banco de España. Al depender de la evolución de un índice en el mercado, el tipo de interés variable permite beneficiarse de las bajadas de tipo; por el contrario, si la tendencia es al alza, consecuentemente el tipo de interés y las cuotas se incrementarán.

En la hipoteca a tipo de interés fijo, el tipo de interés no depende de la evolución de ningún índice en el mercado. Este tipo de hipotecas es adecuado para aquellas personas que quieren tener seguridad de cuál va a ser el tipo de interés y el importe que va a pagar en cada momento, sin estar sujeto a la evolución de un índice.

Además de las dos opciones anteriores existe también la hipoteca a tipo de interés mixto que combinan el tipo de interés fijo y el variable: se fija un plazo inicial en el que se aplica un tipo de interés fijo y el resto del periodo se aplica un tipo de interés variable.

En una compraventa de una vivienda hay que distinguir dos tipos de gastos:

• Inherentes a la propia operación de compra, asumidos por el comprador:
  • Impuestos: IVA y AJD (Actos Jurídicos Documentados) si el inmueble es nuevo o ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales) si el inmueble es de segunda mano. El tipo a aplicar depende de cada Comunidad Autónoma.
  • Inscripción en el Registro de la Propiedad.
  • Gastos de firma de la escritura de compraventa en Notaría.
• Gastos de la Gestoría que intervenga en la tramitación.
  
• Relacionados con la financiación, en caso de que el comprador solicite un préstamo hipotecario:
  • Gasto de Tasación: asumido por el comprador / prestatario.
  • Gastos de Impuestos (AJD), inscripción en el Registro, firma de la escritura de préstamo en Notaría y Gestoría son asumidos por el Banco que otorga el préstamo.

La novación de una hipoteca consiste en un nuevo pacto entre prestamista y prestatario para cambiar algún dato del préstamo ya firmado, como puede ser el tipo de interés, el plazo, las condiciones de bonificación, etc.

La firma de la novación, al igual que la del préstamo hipotecario se efectúa en escritura ante Notario y se inscribe en el Registro.

Los costes asociados a la novación pueden variar en función de los cambios que se realicen y la entidad prestamista puede cobrar una comisión por novación, siempre que esté inicialmente pactada en la escritura del préstamo hipotecario.

Cuando decidimos comprar una casa, es necesario tener en cuenta los documentos que el vendedor debe entregar para poder comprar la casa:

• Escritura de la propiedad.
• Nota Simple que confirme la titularidad de la propiedad, así como las deudas que soporten dicha casa en la actualidad.
• Certificado de eficiencia energética.
• Cédula de habitabilidad.
• Recibo del IBI (Impuesto de bienes inmuebles) al corriente de pago.
• Certificado de deuda con la comunidad de vecinos de estar al corriente de pagos.
• Recibos de los suministros básicos de la vivienda.

Adicionalmente, y aunque no es obligatorio, es interesante que el vendedor nos facilite los planos de la vivienda, los estatutos de la comunidad de vecinos, características de la urbanización donde está ubicada la vivienda, etc…